Un Finistère en miniatura…
Para venir y habitar este lugar hemos elegido construir allí una alegoría en miniatura de Finistère… Sobre una plaza completamente revestida de granito azul de Huelgoat, el ring de plantas viene a desbordarse para acabar interrumpido, como deshilachado, dentro de la perspectiva de la calle de Lyon: se trata de una plaza alta, construida como una tribuna de landa bretona sostenida por grandes árboles de hormigón blanco, con una super cie incierta de papel plegado, y que domina sobre un mar de granito azul. Esta landa atraviesa en dirección oblicua desde la calle Duquesne a la calle de Siam sobre una cubierta de madera por el trazado natural, el que habríamos seguido entre los brozales.
A lo largo del pasaje se disponen las terrazas de los restaurantes, como embarcaderos que dan al tapiz de vegetación, en las que nos sentamos para mirar la iglesia de Saint-Louis.
Finalmente, adoptando la forma de balcones de teatros girados hacia la iglesia, dos pequeños edi cios de tres plantas, menos altos que los que bordean el entorno, dibujan junto con el edi cio de la calle Algésiras, una nueva calle de los Pabellones, al mismo nivel que su entorno. Completamente revestidos de cobre barnizado, colocados como dos joyas pulidas sobre un zócalo de plantas, giran hacia el suroeste grandes balcones dispuestos en proyección.